Compartimos publicación aparecida en Revista Nos, acerca del Colegio SS.CC. Concepción
Comenzando su segundo periodo como rector del Colegio Sagrados Corazones (SS.CC.) se encuentra Marcelo Filippi Marchant, profesor de Lenguaje y Doctor en Educación que ha sido confirmado en el cargo hasta febrero de 2020, y quien será el encargado de seguir liderando las permanentes mejoras en infraestructura y calidad de la educación que ya se vienen efectuando hace algunos años en este establecimiento próximo a cumplir 105 años de existencia.
El profesional señala que la directriz de la rectoría se basa en un proyecto educativo que busca formar alumnos integrales, con conciencia social, que procedan con solidaridad y fraternidad a la luz del Evangelio. Es desde esta base que se desglosan las múltiples actividades formativas, pastorales, deportivas y académicas del establecimiento. Durante su primer periodo como rector, la gestión se basó en concretar importantes mejoras en la infraestructura de los SS.CC., como la construcción e inauguración de una pista atlética y una cancha de fútbol, que contempló una inversión de $700 millones. Asimismo, renovó su laboratorio de ciencias y creó dos más, todos completamente equipados, que son ocupados para las asignaturas de Biología, Química y Física del Ciclo Mayor del Colegio. “Nos dimos cuenta que existía en la comunidad de los SS.CC. un gran anhelo por la habilitación y renovación de ciertos espacios educativos, en especial los deportivos. Basados en eso, el directorio decidió permitir la búsqueda del financiamiento para estas obras, y hoy ya se cuenta con esta increíble cancha y pista atlética, completamente iluminada, que vino a realzar los torneos deportivos de alumnos y apoderados.
De igual manera, el mejoramiento de estos espacios impactaría otras áreas que también requerían atención y, rápidamente, nos abocamos a ello, pues entendemos que cada mejora que se realiza va en directo beneficio de los alumnos, permitiéndoles desarrollar de mejor manera todas sus potencialidades y talentos”, afirma el rector. Pero, además, se diseñó y construyó una sala de activación y psicomotricidad, junto a un taller de acercamiento a las ciencias para los alumnos de Educación Parvularia, lo que se enmarca en la línea de los SS.CC. de brindar una mejor calidad de enseñanza-aprendizaje desde los primeros niveles. “Para ello se han ido incorporando nuevos espacios de desarrollo, innovación y potenciación, poniendo a la vanguardia un currículum que se inspira en la metodología Reggio Emilia, que persigue crear una escuela amable, es decir, activa, inventiva, comunicable, un lugar de investigación y aprendizaje”, afirma Valeria Matus Torres, coordinadora del nivel de Educación Parvularia. Es bajo este enfoque que nace la idea de tener salas especializadas y acondicionadas para los niños, buscando crear atmósferas y procesos enriquecedores para que experimenten un desarrollo integral de su potencial, por medio de talleres de música, inglés, psicomotricidad, y poniendo a su disposición la tecnología como herramienta educativa. “Viendo lo enriquecedora de esta experiencia, decidimos ir, poco a poco, ampliando estas mejoras, como la incorporación de pizarras touch a las salas de clase, junto a otros elementos tecnológicos, a otros niveles. Nos dimos cuenta de que se generó un sistema tan enriquecedor en preescolar, que debíamos darle una continuidad en los primeros cursos de enseñanza básica; es por ello que, desde este año, incorporamos a esos cursos la metodología de co-enseñanza, a fin de asegurar y mejorar los aprendizajes de nuestros estudiantes, desarrollando un nuevo modelo de aula interactiva, con el uso de Tic, y facilitando el trabajo docente al promover espacios de colaboración en los procesos de planificación, ejecución y evaluación de los contenidos, además de contar con dos docentes permanentes en aula en cada una de las asignaturas. Creemos que este es un proyecto muy potente”, sostiene Filippi.
Agrega que en este nuevo periodo como rector seguirá fortaleciendo la inversión en mejoras concretas de los distintos espacios educativos, y trabajando para consolidar el proceso de evaluación del desempeño docente. “Estamos apostando por mejorar los procesos académicos de manera gradual, pero muy significativamente y, a la vez, entendiendo que los colegios de Iglesia son lugares de misión, que no reciben sólo a católicos, sino que a cualquier persona que quiera acercarse, junto a sus hijos, a la fe. Estamos trabajando en renovar nuestros programas pastorales, buscando mejorarlos y actualizarlos, hacerlos más cercanos, integrando una visión acorde a estos tiempos, que logre generar en nuestros estudiantes una mirada crítica de la sociedad, que sea un llamado real a mejorarla”.