Fuente: Comunicaciones Picpus
Del 26 al 30 de junio, ha tenido lugar en Quito (Ecuador), en la casa de encuentros “Bethania” (de la Conferencia Episcopal), el capítulo constituyente de esta nueva provincia.
En la eucaristía del comienzo del capítulo, el lunes 26 de junio, el Superior General leyó el decreto por el cual se erigía la nueva provincia, fruto de la unión de la provincia del Perú, la viceprovincia de Colombia y la viceprovincia de Ecuador, que en ese momento quedaban suprimidas.
Se trata de una provincia nueva, pero que nace a partir de una larga historia misionera de la Congregación en estas tierras: en Perú desde 1885, en Ecuador desde 1948, en Puerto Rico desde 1953, en Colombia desde 1962.
El capítulo estaba formado por 19 miembros: los tres superiores mayores, cinco delegados de cada una de las tres comunidades mayores, y el Superior General (que presidía el capítulo). La nueva provincia cuenta con 53 hermanos, presentes en 4 países (Colombia, Perú, Ecuador y Puerto Rico), distribuidos en 13 comunidades locales, sirviendo en 4 colegios, en 13 parroquias y en otros ministerios diversos. La media de edad está en torno a los 48 años. Es una provincia muy joven donde la inmensa mayoría de los hermanos está en ministerio activo.
El capítulo ha aprobado los Estatutos Provinciales y el Proyecto de Vida Religiosa Apostólica de la provincia, y ha elegido el primer gobierno provincial. El superior provincial es Raúl Pariamachi, que obtuvo un amplio consenso tanto en el sondeo realizado entre todos los hermanos de la provincia como en la elección realizada por los capitulares. Raúl nació en Lima (Perú) en 1964. Profesó en la Congregación en 1995. Fue superior provincial del Perú durante tres mandatos, entre 2006 y 2015. Es profesor de teología y está preparando un doctorado. Este año había comenzado como maestro de novicios del noviciado interprovincial de la CIAL (Conferencia de América Latina).
Los consejeros, elegidos todos por el capítulo, son: Elí Perdomo (de Colombia, 61 años), Hilvar Loyaga (de Ecuador, 55 años), y Lucio Colque (del Perú, 43 años). El capítulo ha decidido que la sede de la provincia esté en Lima.
El proceso de preparación de esta unión ha durado tres años. El objetivo que se perseguía era el de reforzar la misión de la Congregación en esta área geográfica, ensanchar el horizonte apostólico de los religiosos, y promover un mejor cuidado de los hermanos. Comienza ahora la tarea de organizar la nueva provincia y de ayudar a los hermanos a crecer en comunión y en trabajo conjunto en la misión. El excelente clima de diálogo y fraternidad que ha reinado en el capítulo ofrece un esperanzador punto de partida para esta nueva aventura misionera.
