Fuente: Causa Esteban Gumucio - www.estebangumucio.cl
Sergio Silva ss.cc. se encuentra en Roma desde marzo de 2017 apoyando el proceso de la positio de la causa del padre Esteban. En diciembre regresó a Chile para descansar, pero también para realizar un trabajo central con el material inédito original que se encuentra en los archivos de la congregación en Chile.
Así, desde diciembre de 2017 y hasta el 27 de abril recién pasado, día que partió de regreso a Roma, estuvo clasificando y seleccionando todos los escritos originales del padre Esteban que en números aproximados son 1900 que no se encuentran publicados en los 7 libros que la Fundación Coudrin ha editado después de su muerte.
Entre ellos hay numerosos retiros, canciones, cuentos, reflexiones, cartas a Jesús, escritos sociales, divididos en temas como espiritualidad, Sagrados Corazones, vida religiosa, escritos sobre si mismo, ancianos, amor humano, María, diáconos y sacerdotes, oración, etc…
Este trabajo exhaustivo lo hizo leyendo cada uno de los textos y seleccionando aquellos que develan la riqueza de la espiritualidad del padre Esteban y que serán un aporte para la Congregación para la Causa de los Santos en el Vaticano.
Para ello también se configuró nuevamente la Comisión histórica delegada en el tribunal eclesiástico para formalizar el envío del nuevo material como parte de la investigación diocesana.
Algunos rasgos de Esteban que aparecen en este valioso material consultado, está por ejemplo su disponibilidad para dejarse conducir por el Espíritu de Dios, para hacer la voluntad de Dios en cada momento de su vida. Es hermoso ver cómo está atento a descubrir lo que Dios quiere de él, buscando su voluntad en diversas fuentes. Ante todo en la palabra de Dios, que trata de escuchar en su lectura cotidiana de la Sagrada Escritura y en la también cotidiana adoración eucarística. Reconoce también la voluntad de Dios en las decisiones que toman su comunidad religiosa y sus superiores, así como las autoridades de la Iglesia; se puede decir que el padre Esteban es un hombre de obediencia. En una carta al superior general de la congregación, del tiempo en que era provincial de Chile, se encuentra la siguiente afirmación: “Una vez más me repito a su disposición, si Ud. me cree útil para algo. ¡Soy tan feliz cuando puedo obedecer!” (carta del 22 de enero de 1952).
Confiamos que este nuevo paso vaya allanando el camino para que la figura de Esteban sea cada vez más conocida como un amigo de Jesús que nos acerca a todos a una vida de fe más plena. Agradecemos el tremendo y generoso servicio de Sergio Silva, sin el cual esto no habría sido posible.