Desde el 14 hasta el 18 de enero, Pedro León ss.cc. participó en un curso abierto titulado: Los delitos más graves en Derecho Canónico, investigación previa y buenas prácticas, impartido por el Centro UC de Derecho y Religión. Pedro es delegado provincial para la recepción de denuncias por abusos sexuales contra menores de edad, que pudieran involucrar a religiosos ss.cc.
Llegaron de todas partes de Latinoamérica a este curso, por lo que el intercambio de experiencias fue fundamental. El espacio tenía por finalidad “proporcionar una formación en la regulación jurídica de los delitos más graves en el Derecho Canónico, tanto en las normas de fondo como en los procedimientos, otorgando una certificación para quienes corresponda dirigir o asumir la investigación previa de denuncias al interior de la Iglesia”. Estas materias fueron complementadas con aspectos relevantes que surgen en el tratamiento de los delitos de abuso sexual a menores, desde el punto de vista de atención y reparación a las víctimas, en la relación con la justicia estatal, y la dimensión comunicacional.
Desde la Congregación para la Doctrina de la Fe, mons. Mateo Visioli, en videoconferencia desde Roma, aseguró que mientras mejor esté realizada la investigación previa, el proceso posterior es más fácil y rápido, siendo posible proceder con may0r prontitud a la resolución de las causas. Para Pedro León “la experiencia fue muy significativa para ir profundizando en esta temática que tiene que ver con la necesidad de la congregación y de la Iglesia, pero también detectar aquí una frontera y un espacio de evangelización que es clave en este tiempo, y que tiene que ver con devolver la credibilidad, con cuidar a las víctimas, con preocuparse de sostener procesos jurídicos justos y adecuados para todos”.
En el curso participaron vicarios judiciales de diócesis, laicos abogados, superiores de congregaciones, entre otros, pues lo que se busca es abrir posibilidades para que otras personas que no sean sacerdotes, y que pueden llevar a cabo las investigaciones previas en el caso de los delicta graviora (delitos graves) en derecho canónico, sean personas capacitadas para este tipo de diligencias.