El sábado a las 10 de la mañana, asumió formalmente el acompañamiento de la parroquia San Pedro y San Pablo, Sandro Mancilla ss.cc. René Cabezón, dejó su responsabilidad luego de 10 años y después de haber tenido que quedarse un tiempo más. Siendo Superior Provincial debió enfrentar la abrupta partida de Enrique Moreno, quien estaba recién nombrado párroco.
Por eso lo vimos visiblemente emocionado de cerrar este ciclo de acompañamiento de esta tan querida parroquia fundada por el mismo Esteban Gumucio.
Por su parte, al mediodía del domingo 17 sucedía lo mismo en la parroquia San Damián de Molokai. Pedro León ss.cc. asumió como “servidor de su rebaño” como se define al párroco, luego que Claudio Carrasco fuera destinado a Diego de Almagro.
En ambas ceremonias se hizo el signo del lavado de pies a los responsables de cada comunidad: “El párroco es el servidor de su rebaño. Siguiendo el mandato del Señor que dijo: «Si yo que soy Maestro y Señor les he lavado los pies, también ustedes deben lavarse mutuamente los pies»”.
Ponemos en la manos del Señor el servicio de estos dos hermanos que comienzan su tarea con esperanza en medio de una Iglesia sacudida por el dolor. Sin duda vienen nuevos tiempos para estos nuevos párrocos.
