Como todos los años, Punta de Tralca fue el lugar de encuentro para los hermanos de nuestra congregación ss.cc, oportunidad en que prácticamente todos los integrantes de la provincia Chile-Argentina, se dan cita para compartir y reflexionar. En la misma oportunidad se realizó la segunda parte del capítulo provincial iniciado en agosto pasado y postergado en su etapa final programada para octubre, debido a la crisis social que vive nuestro país.
Asamblea Anual
En esta ocasión los dos primeros días fueron destinados a la asamblea anual, en la que no sólo se reflexionó acerca de los temas que como Congregación estamos afrontando, sino también, acerca de la contingencia social que vive Chile.
De esta manera la jornada se inició con la exposición del p. Fernando Tapia sobre el “Discernimiento Pastoral” y cómo esta metodología puede ser usada en los colegios, parroquias, movimientos juveniles y en las distintas obras ss.cc, lo que ayudará a realizar de mejor manera el discernimiento pastoral y comunitario.
Fue invitado además, el Director del INDH, Sergio Micco, quien compartió el informe realizado sobre derechos humanos en nuestro país, en base a lo cual se dialogó respecto del rol que se debe cumplir como iglesia y como congregación en estos días. Fue así como algunos hermanos decidieron realizar un gesto de apoyo a los cientos de víctimas que han perdido su visión o han resultado heridos durante las manifestaciones sociales, levantando carteles y realizando gestos de apoyo en la foto oficial del encuentro.
Segunda parte Capítulo Provincial
Con el tema “El Hombre Interior”, como centro de la conversación, se está realizando desde el 22 y hasta el 24 de enero, la segunda parte de nuestro Capítulo Provincial, el que se inició en agosto pasado y que debió ser aplazado dada la contingencia social por la que está atravesando Chile.
Las conclusiones y decisiones que resulten de este Capítulo conformarán el programa del Gobierno Provincial los próximos 3 años.
Fernando Cordero, Consejero General ss.cc, que ha estado acompañando a los hermanos, se refirió al proceso señalando que: “Los hermanos, en un Capítulo con metodología sinodal, han sentido el estallido social del país y, al mismo tiempo, no han olvidado su compromiso con las víctimas de los abusos. En escucha atenta a Dios, a la realidad y al sufrimiento, los próximos años estarán marcados por el cuidado de la propia vocación y una apuesta decidida por una renovación pastoral y una nueva manera de ser Iglesia. El Gobierno General de la Congregación quiere apoyar a los hermanos en estos delicados momentos, confía en el potencial de la Provincia chilena en el marco de América Latina y de la Congregación, en camino conjunto con nuestras hermanas ss.cc y con los laicos. Queremos, al mismo tiempo, apoyar a los hermanos ss.cc de Chile y Argentina a atravesar con sentido creyente esta crisis”.
En el mismo sentido Alex Vigueras comentó que el tema marco de este Capítulo, “El Hombre Interior”, ha permitido adentrarse en temas actuales que afectan tanto a la iglesia, al país y a nuestra Congregación. De esta manera el documento final se referirá a los abusos en la iglesia y al cómo nos hacemos cargo de las víctimas y sus procesos de reparación, la integración de las mujeres y los laicos, el estallido social y por supuesto la conversión pastoral.
“Lo más importante que veníamos tratando era la crisis de los abusos en nuestra iglesia, de la que también hemos sido parte y que nos ha impactado bastante, lo que nos ha significado un remezón y un cuestionamiento muy a fondo” más aún cuando en la primera etapa, el año pasado se escuchó el relato de una de “nuestras víctimas”, señaló Alex Vigueras.
Sin embargo, el estallido social hizo ampliar el foco de lo que se venía conversando respecto del hombre interior, que tiene que ver con la vida contemplativa, el trabajo personal y la interioridad; y por otro lado, el llamado a la conversión pastoral. De esta manera “integramos la situación del país, lo que planteó un interesante desafío en orden a hacerse cuestionamientos más profundos y con respuestas más osadas”, puntualizó Vigueras. Nos hemos dado cuenta de que “como sacerdotes hemos sido parte de una cultura clericalista y machista y por ahí debemos dar pasos importantes en la integración de la mujer en los niveles de decisión”, además de la necesidad de profesionalizar nuestros servicios, sobre todo en el acompañamiento de las personas y cómo tener instancias de control y evaluación.
Todo esto estará contenido en un documento, el que una vez terminado el Capítulo será compartido y difundido, en busca de una manera más evangélica de hacer las cosas durante los próximos años.
