Expresó Bernardita Zambrano, Coordinadora de la Gestión Parroquial Provincial, quien organizó un ciclo de talleres de liturgia, guiados por Guillermo Rosas sscc
Más de 120 laicos y laicas de comunidades SSCC, recibieron formación litúrgica en un ciclo de cuatro talleres, que se desarrollaron entre los meses de octubre y diciembre, dos sesiones de un taller básico y dos más de uno avanzado, donde nuestro hermano Guillermo Rosas sscc, primero introdujo a los asistente en el mundo de la Liturgia y luego profundizó algunos temas fundamentales, para celebrar la fe junto a sus comunidades.
Estos talleres tuvieron lugar primero, en la parroquia Damián de Molokai de San Joaquín, los básicos y los avanzados en la parroquia San Pedro y San Pablo de La Granja, sin embargo, en su modalidad online estuvo abierto a todas las obras sscc, que quisieron participar.
Guillermo Rosas sscc, guía de estos encuentros, evaluó satisfactoriamente esta experiencia y quedó disponible para dar todo tipo de formación, que fuera de sus competencia: “Quedé contento, espero que sea provechoso, esto más que llenar a las personas de informaciones, es introducirlos en el mundo de la Liturgia, con entusiasmo, con la idea que sea querible para ellos, no sólo un mundo de rúbricas, normas y de cosas que hay que cumplir. Ha sido un tiempo bien aprovechado, donde tuve la posibilidad no sólo de hablar, si no también interactuar con las personas de distintas pastorales y que me contaran su experiencia con la Liturgia”, expresó el religioso.
Experiencias como las del matrimonio compuesto por Tamara Barros y Carlos Gana, quienes son animadores de la capilla Jesús de Nazaret, de la parroquia Damián de Molokai, quienes han tenido que liderar las liturgias dominicales: “Ha sido complejo, pero un gran desafío, pues por la falta de sacerdotes asumimos la liturgia, al principio las personas se iban, pero pronto comenzaron a comprender que la liturgia no la hace un sacerdote, si no una comunidad” contó Carlos.
Su esposa Tamara Barros, agregó que tuvieron que implementar ciertas estrategias, como hacer un desayuno, luego de la Liturgia, para compartir la vida :“La gente también ha ido comprendiendo, que todos tenemos que hacer la liturgia, no solo los encargados y ahora la preparamos entre varios”, comentó.
Ambos participaron de este ciclo de talleres y ahora se sienten más preparados para guiar la Liturgia en su comunidad y donde se requiera.
Todos somos sacerdotes, profetas y reyes
Para la Coordinadora de la Gestión Parroquial Provincial, Bernardita Zambrano, formaciones como estas, son vitales para empoderar a los laicos y laicas: “En la Iglesia estamos aprendiendo sobre nuestra triple manera dada en el bautismo, es decir, somos por gracia: sacerdotes, profetas y reyes. Todos los bautizados/as somos corresponsables de la misión de enseñar, santificar y administrar en la iglesia”, precisó
Asimismo agregó que, los talleres de Liturgia han permitido reafirmar que todos y todas contribuimos para crecer en las verdades de la fe, que celebramos en cada eucaristía, “pero también en la celebración de la palabra sin sacerdote, en la distribución de la comunión, en la oración por los difuntos, en las oraciones de bendición, etc. Celebrar nuestra fe, nos llena el alma, que el Espíritu Santo continúe despertando los ministerios laicales que colaboren a mantener viva y hermosa nuestra Liturgia”, expresó con anhelo Bernardita.
Así lo vivió Zainel Valera, agente pastoral de la parroquia San Pedro y San Pablo, quien estaba muy contenta con la oportunidad de participar en este ciclo de talleres : “Fui privilegiada de poder participar de estos talleres tan completos y sobre todo dictados por un buen especialista. Los laicos somos discípulos y misioneros, por lo que debemos estar cuidadosamente preparados y esta fue una muy buena instancia”, finalizó la también migrante venezolana, valorando el espacio de compartir con otras parroquias y comunidades.