Una Historia de Pablos

La experiencia de Pablo Bernal en La Unión, Chile, marcó profundamente su vocación religiosa y sacerdotal, reforzando su deseo de servir entre los más humildes. Se ordenó en Sevilla, España, el sábado 22 de junio de 2024.


Rafael Domínguez sscc, quien hoy vive en la comunidad de Diego de Almagro, en Atacama, fue uno de sus compañeros cuando ambos vivieron en La Unión. Hoy resalta la dedicación y compasión de Pablo Bernal: “Tenía una perseverancia impresionante, incluso ante situaciones complejas, y un corazón que se conmovía fácilmente ante el sufrimiento de los pobres”.

Rafael Dominguez, sscc.

Rafael cuenta: “Me acuerdo de una persona que no tenía hogar y Pablo se preocupaba de que tuviera dónde alojar. Como no había lugar, consiguió una capillita que se usaba muy poco. Ante los riesgos que implicaba hacerse cargo de una persona de la calle y muy vulnerable, Pablo manejaba las llaves de la capilla y se preocupaba de dejarlo bien instalado todas las noches, y a las seis de la mañana ya iba a buscarlo para que desayunara. Pablo se movió mucho para que esta persona pudiera tener una casita”.

Al ser consultado por este portal luego de ser ordenado sacerdote en Sevilla, Pablo dijo: “La Unión es muy importante para mí. Ha sido de los años más significativos en mi formación como religioso de los Sagrados Corazones”.

Pablo Bernal, sscc.

Sobre el impacto que tuvo en su formación el año que vivió en La Unión, señala: “En primer lugar, el conocer cómo se encarnaba el carisma de la Congregación en una realidad diferente a la mía. Descubrí que nuestro carisma no está encerrado por fronteras, sino que se expresa de distintas maneras, con distintos acentos, en tierras diversas, de una manera muy especial y profunda”.

Añade que “durante ese año tuve la ocasión de compartir con cuatro muy buenos hermanos, en particular con dos mayores, Pablo Fontaine y Armando Lanzani. De ellos aprendí mucho: de sus modos de estar, de la vida entera dedicada al servicio de los demás, al Reino y a la predicación. Ellos me han inspirado mucho para ser religioso. Cuando llegó el momento de pedir y prepararme para los votos perpetuos, sus imágenes y testimonios venían a mi mente, y me decía: quiero llegar a viejo como ellos y ser así, como decía el Tata Esteban Gumucio, ‘bienaventurados los viejos’”.

Pedro Gordillo, sscc.

“A veces nos reíamos de Pablo porque cuando volvió de Chile, parecía casi chileno en las expresiones que usaba y vestía con un poncho que le regalaron allí”, recuerda Pedro Gordillo, superior de la Provincia Ibérica de la Congregación.

Y continúa: “Pablo Fontaine fue para Pablo Bernal una de las personas importantes con las que se encontró en Chile y aprendió a gustar los textos y las letras de Esteban Gumucio que le han acompañado y le siguen acompañando hoy. En el fondo, fue una experiencia de fe en la congregación comunitaria, de ver que hay hermanos en otro lugar, muy lejano, que se siguen encargando de la misión con los más pobres, de la gente sencilla, y de dar su vida e intentar vivir como ellos. Creo que esto es algo que a Pablo le marcó y le sigue marcando, tanto que él se siente, a la vez, hermano de la provincia Ibérica y de la provincia de Chile-Argentina. Creo que eso es bonito”, afirmó.

Pedro dice que “Pablo tiene una cabeza privilegiada para muchas cosas, entre otras las matemáticas, pero también tiene una capacidad especial para darse cuenta de por dónde Dios le va hablando. Tiene capacidad para acoger esa llamada e ir en su búsqueda. Él sabe escuchar”.

Rafael también lo entiende así. “Lo recuerdo como un gran lector y muy culto. Era un excelente hermano de comunidad, muy preocupado y activo en la vida comunitaria, y para generar vida comunitaria. Por lo tanto, fue un muy buen aporte. Recuerdo que, como comunidad, cuando nos pidieron un informe, el nuestro fue muy positivo en cuanto a la relación con la gente. Tenía excelente relación, muy responsable con las tareas encargadas, muy perseverante, incluso ante situaciones complejas, con un corazón que se conmovía fácilmente ante el sufrimiento de los pobres”.

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