Se renueva el equipo de gestión de la parroquia San Damián de Molokai

La comunidad de la parroquia San Damián de Molokai, que comenzó su camino sinodal en 2021, y es administrada colegiadamente por dos laicos, un diácono y un sacerdote moderador, inició un nuevo ciclo el pasado domingo 8 de septiembre. En esta ocasión, se incorporaron los laicos Magaly Bustamante y Luis Antonio Pulgar, quienes reemplazarán a Claudia Barriga y Nelson Díaz, que cumplieron dos años en esta misión.

 

Magaly Bustamante y Luis Antonio Pulgar llegaron a la parroquia San Damián de Molokai, ubicada en San Joaquín, poco antes del mediodía del pasado domingo 8 de septiembre, listos para realizar su “juramento de fidelidad y profesión de fe” como nuevos miembros del equipo de gestión parroquial.

Ante la presencia del Vicario de la Zona Sur, padre Manuel Martínez; del padre Magín Vega sscc, representante del provincial de la Congregación Sagrados Corazones; el sacerdote moderador Miguel Ángel Concha; del diácono Carlos Tejos, también parte del equipo; y de los laicos salientes Claudia Barriga y Nelson Díaz, se oficializó el compromiso de los nuevos miembros con esta misión encomendada por su comunidad.

Este compromiso se selló con una eucaristía de acción de gracias, presidida por el Vicario de la Zona Sur, Manuel Martínez. La misa fue acompañada por la comunidad, que recibió a los nuevos miembros con alegría y cánticos.

Durante la misa, se recordó el camino sinodal de la parroquia, que comenzó con la formación del primer Equipo de Gestión Parroquial en respuesta a la escasez de sacerdotes en 2021. Desde entonces, conforme a la forma canónica 517,2 se ha confiado la cura pastoral de la parroquia a un equipo conformado por laicos, diáconos y un sacerdote moderador.

Claudia Barriga y Nelson Díaz, laicos salientes del equipo de gestión, agradecieron el apoyo de la comunidad en los buenos momentos y en los desafíos vividos durante estos dos años. Claudia leyó una biografía de Luis Antonio, presentándolo  a la comunidad, y Nelson recorrió la historia pastoral de Magaly.

Uno de los momentos significativos de la misa fue la lectura del Decreto Protocolar, que formalizó el nombramiento de los nuevos miembros del Equipo de Gestión Parroquial (EGP). Estos recibieron simbólicamente las llaves del templo y del Santísimo como signos de autoridad y responsabilidad. El padre Manuel Martínez destacó la importancia de estos símbolos, instando al equipo a cuidar la apertura del templo y fomentar la devoción al Santísimo Sacramento.

Una misión compartida

En su homilía, el padre Manuel destacó la misión compartida del nuevo equipo, afirmando: “Nuestros hermanos que hoy día asumen esta misión tienen el deber de acompañar a la comunidad que se les ha encomendado, guiándola por los valores del Evangelio hacia el reino de Dios.” Subrayó la humildad y el servicio como valores esenciales, recordando que “mientras más arriba, más abajo al servicio de los demás y al mundo de Dios”. Con estas palabras, alentó al nuevo equipo a liderar con humildad y dedicación, reconociendo que el verdadero conductor es Dios.

El vicario también enfatizó la importancia de caminar juntos en la fe, recordando que todos, sin importar su rol, están llamados a esta misión. Hizo un paralelo con el pueblo de Israel, que frecuentemente olvida la presencia de Dios después de recibir su ayuda, sugiriendo que también nosotros a veces olvidamos su acompañamiento en nuestras vidas. El llamado es a reconocer y recordar constantemente la guía divina en nuestra misión.

Magaly Bustamante y Luis Antonio Pulgar dirigieron unas palabras a la comunidad, expresando su agradecimiento y compromiso con la misión encomendada.

Por su parte, “Toño”, como lo conocen en la parroquia, compartió con profunda reflexión su nueva responsabilidad: “Al recibir esta nominación, sentí que Dios me estaba llamando a algo más grande, algo que solo se puede entender cuando estamos dispuestos a servir. En mi trayectoria, he aprendido que la verdadera disposición a servir es aceptar el llamado de Dios sin conocer completamente el destino. Como dice San Pablo, ‘Dios quiere que todos se salven y lleguen al conocimiento de la verdad.’ Mi compromiso ahora es ser un instrumento para ese propósito, con el ardor de buscar a Dios y ayudar a la comunidad a encontrarlo. No es solo una tarea individual, sino una misión que asumo con el respaldo y apoyo de esta comunidad que, como dice el Evangelio, está llamada a ser testigo de la verdad y del amor de Dios en el mundo.”

En la misma línea, Magaly, emocionada, expresó su compromiso con una sincera reflexión sobre su rol: “Este llamado a servir en el equipo de gestión parroquial me recuerda a cuando mis oídos fueron abiertos para escuchar el mensaje del Señor. Así como el Evangelio de hoy nos habla de la curación del sordomudo, me siento llamada a abrir mis oídos y corazón para servir a nuestra comunidad. ‘El Señor siempre está con nosotros, iluminando nuestro camino y dándonos la fuerza a través de Su Espíritu,’ como bien sabemos. Acepto este compromiso sabiendo que no lo hago sola, sino con el apoyo de una comunidad vibrante que comparte la misión de construir el Reino de Dios. Mi deseo es que juntos podamos seguir demostrando cuánto nos ama el Señor y cómo ese amor puede transformar nuestras vidas.”

La misa culminó con el compromiso del nuevo equipo y de la comunidad de la parroquia San Damián de Molokai, reflejando el espíritu de unidad y servicio que guiará al nuevo equipo en su labor pastoral.

 

Ir al contenido