En una emotiva misa de despedida, la Congregación Sagrados Corazones y su familia rindieron homenaje a nuestro hermano, quien partió a la Casa del Padre en la madrugada del 17 de diciembre. Su vida y su testimonio dejaron una huella profunda tanto en la comunidad religiosa como en quienes tuvieron el privilegio de conocerlo.
El miércoles 18 de diciembre, la parroquia La Anunciación se llenó de familiares, amigos y miembros de la Congregación Sagrados Corazones para despedir al padre José Vicente. La misa fue presidida por el arzobispo de Concepción, Sergio Pérez de Arce sscc, y contó con la participación del provincial Sandro Mancilla sscc, la mayoría de los religiosos de la provincia Chile-Argentina, y su sobrino sacerdote Martín Donetch. Fue un homenaje cargado de emoción y gratitud.
Un formador que acompañó procesos
En su homilía, el provincial Sandro Mancilla destacó la entrega del padre José Vicente en la formación espiritual y humana de la comunidad:“Logró comprender los procesos de cada persona, ofreciendo siempre lo que necesitaban para seguir creciendo. En su vida, buscó comprender el misterio del ser humano desde su relación con Dios”.
El provincial también recordó cómo vivió su enfermedad con una fe inquebrantable:“Él decía: ‘Si se va el aire, ahí estarán los brazos de Dios para recibirme’. Su confianza y abandono en el Señor nos dejan un testimonio profundo de fe”.
Un legado en los corazones
Keka Schilling, representante del proceso Camino Espiritual SSCC para laicos, rindió homenaje al legado del padre José Vicente, expresando: “Su intensa fidelidad a Jesús y María, incluso en su enfermedad, nos deja un ejemplo imborrable de paz, amor y esperanza. Su vida reflejó un mensaje constante de gratitud a Dios, y prometemos mantener su legado vivo en nuestros corazones y oraciones”.
Por su parte, una de sus sobrinas ofreció unas palabras cargadas de afecto, resaltando su cercanía familiar y su impacto en sus seres queridos:“El ‘tío Checho’ fue un pilar en nuestras vidas, siempre generoso y lleno de amor. Recordaremos sus historias, su apoyo incondicional y el profundo testimonio de fe que nos regaló. Su legado vive en cada uno de nosotros, y confiamos en que volveremos a encontrarnos”.
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Un padre que aprendió a ser hijo
El provincial Sandro Mancilla concluyó destacando la transformación espiritual del padre José Vicente durante sus últimos años: “Aprendió a ser profundamente hijo de Dios, abandonándose con confianza en sus manos. Esa experiencia lo preparó para partir con paz y dejar un ejemplo de vida para todos nosotros”.
Una vida dedicada al servicio
La despedida del padre José Vicente Odriozola sscc fue un testimonio de su vida entregada al servicio de Dios y de la comunidad. Su legado de amor, fe y esperanza quedará grabado en quienes lo conocieron. La misa, que reunió a la mayoría de los religiosos de la congregación, sus familiares y representantes de las comunidades que acompañó, reflejó la conexión espiritual y familiar que cultivó a lo largo de su vida.
La Congregación Sagrados Corazones agradece profundamente a Dios por su vida y reza por su eterno descanso en los brazos del Padre Misericordioso.
